La continuidad asistencial una vez superada la fase aguda, el gran reto en el tratamiento del ictus
La Fundación Casaverde organiza una Jornada para proporcionar a los profesionales sanitarios protocolos unificados para las fases postaguda y crónica
El ictus, considerada la enfermedad del siglo XXI por su prevalencia, con elevadas tasas de mortalidad, representa alrededor del 4 por ciento del gasto total sanitario en España, la mayor parte originado en la fase aguda hospitalaria, el proceso de rehabilitación y los programas de apoyo socio-sanitarios.
La fase aguda del ictus cuenta con unos tratamientos homogeneizados compartidos por los servicios de salud de las distintas comunidades autónomas gracias a las guías de práctica clínica y a los protocolos coordinados de actuación en la fase de activación, en los que intervienen los diferentes niveles asistenciales: urgencias, atención primaria, neurología o cuidados intensivos.
Los inconvenientes surgen cuando, una vez superada la fase aguda, los protocolos se adaptan a los recursos, y no al revés, lo que conlleva un alto grado de indefinición y de heterogeneidad. A partir de ese momento, las actuaciones que se llevan a cabo dependen de las infraestructuras disponibles pese a que, igual que en la fase anterior, los criterios de los especialistas están perfectamente definidos y basados también en protocolos de evidencia clínica.
Con el objetivo de unificar y proporcionar toda esta información a los profesionales sanitarios, la Fundación Casaverde ha organizado, para el próximo 24 de octubre, la Jornada “Continuidad asistencial en el ictus”, dirigida a directivos y profesionales sanitarios y sociales. En el encuentro, además de presentar a los asistentes el marco actual de coordinación en los niveles de asistencia para el tratamiento del ictus, también se les facilitará un documento de consulta con los criterios de toma de decisiones.
La jornada contará con la participación de una veintena de expertos y la ponencia inaugural correrá a cargo del Dr. Exuperio Díez-Tejedor, jefe del Servicio de Neurología del Hospital Universitario La Paz, y de la Dra. Aránzazu Vázquez Doce, coordinadora de Rehabilitación en la Unidad de Ictus del Hospital Universitario de La Princesa.
La primera mesa de debate, moderada por el Dr. José Antonio Egido, jefe de la Unidad de Ictus del Hospital Clínico San Carlos, girará en torno a la “Continuidad asistencial pre y hospitalaria en el ictus: emergencias, urgencias, neurología, rehabilitación, enfermería y trabajo social”. La segunda mesa, que versará sobre “Continuidad asistencial en las fases postagudas y crónicas del paciente con ictus”, estará dirigida por el Dr. Luis Gangoiti, jefe del Servicio de Rehabilitación del Hospital del Tajo.
El presidente de la Fundación Casaverde, Alberto Giménez Artés, considera imprescindible, dentro del proceso de seguimiento del ictus, “responder adecuadamente a las necesidades de las personas/pacientes en cada una de las situaciones”. Ello sin perder de vista la necesidad de que el sistema de salud español pueda seguir mejorando en la atención durante las fases agudas. “Hacerlo así -señala- mejorará la calidad de vida de las personas y, al mismo tiempo, podremos hacer sostenible en el futuro el Sistema Nacional de Salud”.
La jornada se celebrará a partir de las 9:00 horas del 24 de octubre en el Salón de Actos Ernest Lluch, Pabellón 13, del Instituto de Salud Carlos III de Madrid.
