Joaquim Puntí y Montserrat Pàmias: El impacto de la pandemia. “La covid dispara un 195% los intentos de suicidio entre chicas en Catalunya”

Joaquim Puntí y Montserrat Pàmias, psicólogo y psiquiatra del área de salud mental del hospital Parc Taulí.

Joaquim Puntí, psicólogo clínico y coordinador del hospital de día de adolescentes del Parc Taulí, es autor de Educar en tiempos difíciles (Siglantana). Montserrat Pàmias es psiquiatra y jefa de psiquiatría infantil de este mismo complejo hospitalario de Sabadell. Ambos profesionales han sido testigos del impacto de la covid y el confinamiento en los intentos de suicidio, que en Catalunya se han disparado entre las chicas de 12 a 18 años.

¿Estamos ante un problema de salud pública que todavía infravaloramos?

MONTSERRAT PÀMIAS: Sin duda. Es la segunda causa de muerte entre los jóvenes. Pero sí nos hemos dado cuenta de su importancia. La cuestión es si hemos puesto todos los remedios o no.

¿Qué remedios?

JOAQUIM PUNTÍ: Hemos de empezar desde abajo, con la prevención, trabajando antes de que aparezcan las conductas suicidas. La población adolescente nos preocupa porque es una de las que han registrado un mayor incremento, especialmente en chicas. Pero muchos adolescentes que realizan tentativas autolíticas o que consuman el suicidio no tienen necesariamente una enfermedad mental, aunque la enfermedad mental, una depresión por ejemplo, sea uno de los principales factores de riesgo…

MP: …en realidad, hay dos factores de riesgo: la depresión y haber realizado tentativas suicidas. Pero entre los adolescentes hay tentativas sin que previamente haya habido depresión u otra enfermedad mental.

¿Qué desencadena las ideas autolíticas?

JP: Pueden ser problemas triviales (por favor, triviales con todas las cursivas del mundo). Un conflicto con los amigos a veces se convierte en un obstáculo insalvable que puede propiciar en jóvenes vulnerables una sobreingesta medicamentosa.

¿Ha influido el confinamiento y la pandemia?

MP: La pandemia ha sido un
factor de estrés muy importante. Desde el inicio de la crisis sanitaria, en Catalunya se han disparado un 195% los intentos de suicidio entre las chicas de 12 a 18 años.

¿Y entre los chicos?

MP: Un 10%.

¡Qué desproporción!

MP: Hay una explicación endógena, biológica, de género. En situaciones de estrés, las mujeres tienen más riesgos de incurrir en cuadros depresivos y de ansiedad. En general, los hombres responden a estas situaciones de estrés con más descompensaciones conductuales o de consumo de sustancias tóxicas. La mayor propensión a la ansiedad y a los altibajos anímicos a raíz de la pandemia explica que haya más tentativas de suicidio entre ellas, como ha estudiado la doctora Rebeca Gracia, del equipo de salud mental del Taulí, la primera profesional que ha detectado estas tendencias.

¿Dónde y cuándo debería comenzar la prevención?

JP: No en los centros de asistencia primaria o las áreas hospitalarias de salud mental…

MP: …en las escuelas, si hablamos de gestión emocional y de gestión del malestar, herramientas básicas para no llegar a una tentativa de suicidio.

¿Qué se debería hacer?

MP: Cualquier programa que implique a las escuelas permitirá una prevención universal.

JP: Los adolescentes han de aprender en clase a afrontar un episodio estresante por notas, crisis interpersonales, problemas con la pareja o los padres, conflictos en las redes sociales… Si enseñamos eso, evitaremos que algunos se planteen el suicidio como una opción.

¿Qué pesa más en estas conductas? ¿Los factores exógenos o los endógenos?

JP: No podemos hacer planteamientos reduccionistas…

MP: En general, en salud mental, no hay existe la dualidad externa-interna, sino dos vertientes con diferente proporción. Muchas conductas o trastornos tienen una parte exógena y otra endógena. Hay una vulnerabilidad personal con patologías o situaciones en las que pesa más la parte genética y los componentes endógenos, como la esquizofrenia, el trastorno bipolar y la depresión mayor. Y hay otras situaciones en las que pesan más los factores externos, como los problemas de conducta o las características de personalidad…

Antes se creía erróneamente que hablar en la prensa de estas cosas podía ser un efecto dominó, incitar al suicidio

MP: Hemos aprendido. Ahora sabemos que se ha de hablar, dejando claro que quienes tienen ideas autolíticas pueden hallar ayuda, una salida.

JP: Se ha de hablar, pero bien, huyendo de sensacionalismos o informaciones que insistan en el método utilizado. Esta realidad existe. No podemos ocultarla. Es un problema de salud pública. Y son muertes evitables. ¿Cómo? Explicando que hay profesionales que nos pueden ayudar. También hemos de trabajar con los padres para que no hagan cosas contraproducentes, como crear un mundo a medida de sus hijos para que no tengan estrés o accediendo a todas sus peticiones. Eso no es realista y no evitará el problema.

¿Llega a la consulta una chica de 16 años que ha intentado quitarse la vida? ¿Qué hacer?

JP: ¿Qué no hacer? No hablamos del suicidio en todas las visitas. En la primera cita hemos de analizar muy bien qué ha pasado, contextualizarlo y ver qué podemos modificar y que no es modificable. Si una persona es impulsiva, la impulsividad no es modificable, pero sí podemos darle herramientas para saber qué hacer cuando aparece el malestar emocional y para que aprenda a identificarlo. Así, cuando note que aparecen esos pensamientos, poner en marcha mecanismos para frenarlos. D. Marchena

También te podría gustar...