10 razones para llevar a nuestros hijos al dentista

Centros BQDC

  1. La primera visita al odontopediatra deberá realizarse cuando erupcione el primer diente de leche, entre los 6 y 12 meses de edad. La principal razón por lo que es importante realizar una visita temprana es para que los padres reciban la información adecuada y para establecer un programa de prevención, ya que los problemas dentales pueden aparecer muy precozmente.
  2. La cavidad oral de los bebés se deberá limpiar lo antes posible, aunque no tenga dientes. Se recomienda realizarlo después de cada toma de leche, con una gasita humedecida o con un dedal de silicona. Una vez erupcionado el primer diente, los padres deberán cepillarle con un cepillo suave adecuado al tamaño de la boca del niño
  3. El cepillado dental es responsabilidad de los adultos hasta que el niño posea la habilidad motora para realizarlo, se considerará autónomo a partir de los 8-10 años de edad. Se deberá realizar 3 veces al día con pasta dental fluorada y con un cepillo adecuado a la boca del paciente
  4. Cuando existan puntos de contacto entre los dientes, se deberá empezar a pasar hilo o seda dental para eliminar los restos alimentarios que pueden acumularse en el espacio interdental
  5. El flúor tópico es una herramienta excelente para remineralizar el esmalte y protegerlo del ataque bacteriano, reduciendo significativamente el riesgo de caries de los niños. Lo podemos encontrar en las pastas
    odontopediatria

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    dentales, en forma de colutorio, y también se puede aplicar por parte de un profesional en la consulta dental.

  6. Se deben evitar toda fuente de azúcares fermentables, especialmente durante los primeros años de vida. Hay alimentos con “azúcares ocultos” como son las galletas, bizcochos, zumos industriales, pan de molde, patatas fritas o refrescos, entre otros
  7. Los hábitos como el chupete y la succión del dedo se llaman hábitos de succión no nutritiva. Se consideran normales durante los primeros años de vida y se recomienda eliminarlos antes de los 3 años de edad. Si éstos se prolongan más allá del tiempo aconsejado pueden provocar maloclusiones.
  8. Es muy importante mantener la dentición temporal sana hasta que se realice el recambio dentario de forma natural, ya que esta dentición cumple una serie de funciones fundamentales: proporcionan la función masticatoria, están involucrados en el desarrollo del habla, mantienen el espacio que necesitaran los dientes definitivos, y favorecen un correcto crecimiento de los maxilares.
  9. Si el riesgo de caries del niño es alto y los primeros molares permanentes presentan fosas y fisuras muy pronunciadas, se puede valorar la realización de sellados de fosas y fisuras. De este modo, se facilitará el cepillado y se reducirá el acúmulo de placa dental en los molares definitivos.
  10. Es importante acudir al odontopediatra después de un traumatismo dental. Las raíces de los dientes temporales están íntimamente en contacto con los dientes permanentes sucesores que se están formando dentro del hueso. Durante este periodo, cualquier golpe en los dientes primarios anteriores puede afectar a los dientes definitivos que erupcionarán sobre los 7‐8 años de edad.

Información extraída de http://bqdentalcenters.es/

 

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